Ayer te caíste. Los miedos, las inseguridades, las traiciones, las infidelidades y las mentiras te pusieron la zancadilla, te tiraron de tu montaña, te hirieron en el alma.
Hoy te levantas. El amor, la amistad, la confianza, la familia, la alegría y la felicidad te dieron la mano, te recogieron cuando caías, te pusieron vendas.
Mañana te elevas. Las metas, las risas, las fantasías, las sonrisas y los abrazos te ayudaron a levantarte, te subieron hasta la cima, te curaron el corazón.
Porque al final todo acaba bien, solo tienes que creer en los demás... Y en ti misma.
Oh, así me gusta, textos positivos.
ResponderEliminarMuuuy bien consejo, jajaj :3
Besos, Amanda.
A veces crees es más importante de lo que creemos.
ResponderEliminarMuchos besos :)
La confianza es lo último que se pierde ¿no?
ResponderEliminarSe trata de caerse y levantarse con gusto(:
Te doy toda la razón.
ResponderEliminarMe ha gustado el texto,
Te sigo por aquí, nos leemos! :)
Javier Del Álamo
qué razón tienes en todo lo que dices!!
ResponderEliminarun beso
Qué texto tan bonito... Tienes toda la razón...
ResponderEliminarTe mando un besazo y te sigo!